Skip to content

Artículos científicos

Desarrollo orofacial y neurofisiología de la succión durante la lactancia materna

FOCUS: Desarrollo del recién nacido

La lactancia materna representa un complejo proceso neurofisiológico que implica una sofisticada integración entre succión, deglución y respiración. Es una función vital que, además de garantizar la alimentación, influye profundamente en el desarrollo neuromotor, orofacial y respiratorio del recién nacido.
Comprender los mecanismos que subyacen a la succión y a la coordinación respiratoria durante la toma es esencial para promover una lactancia eficaz, prevenir disfunciones y apoyar un crecimiento armónico.

La succión es uno de los reflejos primarios del recién nacido, presente ya en la etapa fetal, y está mediada por una compleja red neural localizada principalmente en el tronco encefálico. Los centros fundamentales incluyen:

  • Núcleo del tracto solitario (NTS): recibe información sensorial proveniente de la cavidad oral y de la faringe.
  • Núcleo ambiguo: controla la motilidad de los músculos implicados en la deglución.
  • Centros respiratorios del bulbo: regulan la respiración coordinada con la succión y la deglución.
Regulación de la succión, la deglución y la respiración neonatal

La succión se caracteriza por la alternancia rítmica de fases de presión negativa (fase de extracción de la leche) y de liberación, que se desarrollan en un patrón coordinado con la deglución y la respiración.

En los recién nacidos a término, la coordinación succión-deglución-respiración (SDR) sigue habitualmente una relación 1:1:1, donde a cada succión sigue una deglución y una inspiración. Esta coordinación representa una etapa crítica en el desarrollo neuromotor, que mejora progresivamente con la edad y la experiencia, garantizando una alimentación eficaz y segura.

Disfunciones o retrasos en este proceso pueden influir negativamente en el crecimiento y en el desarrollo neuromotor. La postura adoptada por la madre y el recién nacido durante la lactancia desempeña un papel crucial en modular la coordinación neuromuscular entre los procesos de succión, respiración y deglución. Una adecuada posición postural favorece la alineación óptima de las vías respiratorias y de las estructuras orofaciales, reduciendo el esfuerzo muscular y mejorando la sincronización de los reflejos neurofisiológicos implicados en la alimentación neonatal. Esta coordinación integrada es esencial para garantizar un flujo de leche eficiente, la prevención de episodios de aspiración y la estabilidad hemodinámica del recién nacido durante la toma, contribuyendo así a un mejor desarrollo neuroconductual y nutricional.

Fases de la succión nutritiva
  1. Fase de acercamiento: el recién nacido se orienta hacia el pezón, activando el reflejo de búsqueda (rooting).
  2. Fase de agarre: implica la activación de los músculos orbiculares de los labios, buccinadores y maseteros para estabilizar el pezón.
  3. Fase de succión-deglución: a través de la coordinación de lengua, mandíbula y paladar blando, se crea una presión intraoral negativa (succión propiamente dicha) alternada con compresiones positivas (peristaltismo lingual).
  4. Fase de respiración: la secuencia succión–deglución–respiración se desarrolla típicamente en una relación 1:1:1 después de las 37 semanas de edad gestacional.

Esta coordinación es esencial para garantizar un aporte nutricional eficaz, minimizando el riesgo de aspiración y optimizando el gasto energético.

 

Estructuras anatómicas implicadas

El acto de la succión implica:

  • Músculos oro-buco-linguales: geniogloso, milohioideo, digástrico anterior, orbicular de la boca, buccinador.
  • Paladar blando y faringe: esenciales para el cierre velo-faríngeo durante la deglución.
  • Inervación:
    • Nervio trigémino (V): control de la mandíbula y músculos masticatorios.
    • Nervio facial (VII): músculos mímicos y labios.
    • Nervios glosofaríngeos (IX), vago (X), hipogloso (XII): deglución, motilidad lingual y faríngea.

Una adecuada maduración de estos sistemas es un prerrequisito para una succión eficaz, y cualquier disfunción a este nivel puede reflejarse en problemas de alimentación o en trastornos neuromotores posteriores.

Respiración nasal: pilar funcional para la homeostasis respiratoria

La respiración representa un elemento crítico e imprescindible durante la lactancia materna, ya que garantiza la continuidad de la oxigenación y el correcto desarrollo de los procesos de succión y deglución. La vía aérea debe permanecer libre y permeable, con una preferencia funcional por la respiración nasal, que constituye el modelo fisiológico ideal en recién nacidos y lactantes.

La respiración nasal no solo permite un flujo de aire óptimo, sino que también desempeña un papel protector, filtrando, humidificando y calentando el aire inspirado, contribuyendo así a la salud de las vías respiratorias superiores.

Durante la toma, la respiración nasal permite una actividad coordinada con la succión y la deglución, facilitando una secuencia rítmica y sincronizada que minimiza el riesgo de aspiración y de obstrucciones de las vías respiratorias. La obstrucción incluso parcial de las vías nasales puede interferir con esta coordinación, obligando al recién nacido a adoptar una respiración oral menos eficiente, que puede generar un mayor gasto energético, dificultades en la alimentación y posibles problemas a largo plazo como alteraciones en el desarrollo craneofacial y disfunciones respiratorias crónicas. Además, la respiración nasal durante la lactancia contribuye al mantenimiento de una postura lingual correcta y favorece el desarrollo de una musculatura orofacial equilibrada, elementos fundamentales para el crecimiento armónico y para la prevención de trastornos oromotores y fonatorios.

Por lo tanto, la preservación de la permeabilidad de las vías respiratorias nasales mediante una gestión atenta y precoz de eventuales congestiones o anomalías anatómicas se configura como un aspecto esencial para el éxito y la seguridad de la lactancia materna.

La respiración nasal durante la toma:

  • Garantiza un adecuado intercambio gaseoso sin interferir con el acto nutritivo.
  • Favorece una deglución segura, impidiendo el paso de líquidos a las vías respiratorias.
  • Estimula el correcto desarrollo craneofacial a través del mantenimiento de la posición fisiológica de la lengua y del paladar.

La obstrucción nasal, debida a congestiones, rinofaringitis o malformaciones anatómicas (por ejemplo, frenillo lingual corto o desviaciones del tabique), puede alterar la coordinación SDR. En estas condiciones, el recién nacido puede compensar adoptando una respiración oral que reduce la eficacia de la succión y aumenta el riesgo de fatiga e hipoxia intermitente.

Desarrollo motor temprano: la formación de las competencias orofaciales

La succión eficaz requiere la sinergia de diversas estructuras anatómicas y musculares:

  • Lengua: debe ser móvil y capaz de generar una presión negativa para extraer la leche.
  • Paladar blando: cierra la vía nasal durante la deglución, impidiendo el reflujo de líquidos.
  • Mandíbula: realiza movimientos rítmicos de apertura y cierre, coordinados con la lengua.
  • Musculatura facial: implicada en la estabilización de la areola y en el agarre al pezón.
  • Músculos respiratorios: garantizan el flujo de aire rítmico y sincronizado.

La lactancia materna desempeña un papel determinante en el desarrollo armónico de las estructuras orofaciales. La succión activa y rítmica contribuye a:

  • Modelar la morfología del paladar y de los arcos dentarios, reduciendo el riesgo de maloclusiones dentarias.
  • Fortalecer la musculatura facial y lingual, esencial para las funciones masticatorias, fonatorias y respiratorias futuras.
  • Favorecer la respiración nasal fisiológica, fundamental para la salud de las vías respiratorias superiores y la prevención de disfunciones respiratorias crónicas.
  • Apoyar el correcto desarrollo postural, a través de la conexión funcional entre la musculatura orofacial y la cervical.

La lactancia materna exclusiva se asocia con una menor incidencia de respiración oral, otitis recurrentes y disfunciones miofuncionales en comparación con la lactancia artificial. En presencia de dificultades de agarre al pecho, regurgitaciones frecuentes, irritabilidad durante la succión o bajo aumento de peso, es esencial una evaluación funcional completa del recién nacido, que incluya:

  • Evaluación del frenillo lingual (anquiloglosia).
  • Observación de la simetría orofacial.
  • Análisis postural y motricidad global.
  • Verificación de la coordinación S–D–R (succión–deglución–respiración).

La intervención precoz por parte de un equipo multidisciplinario (matrona, pediatra, fisioterapeuta, osteópata, logopeda) puede prevenir complicaciones como dificultades alimentarias, trastornos miofuncionales orales y problemas ortodóncicos.

La succión al pecho es una actividad altamente integrada, que conecta funciones vitales, neuromotoras, estructurales y relacionales. Promoverla, protegerla y apoyarla desde las primeras horas de vida no solo asegura un aporte nutricional óptimo, sino que favorece un desarrollo orofacial y neurológico armónico, sentando las bases para una salud global a largo plazo.

Lau C., Smith E.O., Schanler R.J. (2021). “Oral feeding readiness in preterm infants: neuromotor and respiratory coordination.” Journal of Perinatology

Hill P.D., Aldag J.C. (2020). “The influence of maternal and infant positioning on feeding success and coordination in breastfeeding dyads.” Maternal & Child Nutrition,

Meier P.P., Engstrom J.L., Patel A.L. (2022). “Neurodevelopmental implications of feeding position and coordination in premature infants.” Early Human Development

Geddes D.T., Sakalidis V.S. (2021). “Anatomical and physiological bases of the coordination of sucking, swallowing, and breathing in infants.” Dysphagia

Bingham P.J., Davies P.S.W. (2023). “Postural influences on respiratory patterns during infant feeding.” Pediatric Pulmonology,

Robbins J., Jones S., Gangnon R. (2020). “Coordination of swallowing and breathing in neonates: Impact of feeding posture.” Developmental Medicine & Child Neurology,

Lau C., Smith E.O. (2021). “Neurological mechanisms of suck-swallow-breathe coordination and the effect of positioning in preterm infants.” Seminars in Perinatology

Hill P.D., Humenick S.S. (2020). “Maternal-infant positioning and its effects on oral feeding dynamics.” Journal of Human Lactation

Lopez M., Barlow S.M. (2022). “Sensory-motor integration during infant feeding: Postural considerations and outcomes.” Physiology & Behavior

Smith J.A., Patel A.L., Meier P.P. (2023). “Impact of maternal-infant positioning on suck-swallow-breathe coordination in late preterm infants.” Journal of Neonatal Nursing